Maderas sintéticas para revestimientos

Qué son las maderas sintéticas

Las maderas sintéticas, también conocidas como maderas plásticas, pueden ser una solución muy práctica para el revestimiento de pisos, decks, y también muros y techumbres tanto del interior como del exterior.

Se trata de panchas, listones, baldosones o piezas de un plástico sintético (polímero) entremezclado con fibras naturales, que imita la textura y apariencia de las maderas para revestimientos. Nacieron como una solución decorativa a la vez que funcional para el aprovechamiento del aspecto elegante, clásico y natural de la madera, para climas o ubicaciones no recomendadas (por diversos motivos). Así, las maderas sintéticas son más resistentes a la humedad que las  tratadas, no sufren infestaciones de insectos (desde termitas hasta la carcoma), son más duraderas con el roce y el tránsito, y pueden dar una belleza incorruptible durante años.

Las maderas sintéticas se elaboran de manera estandarizada imitando la textura, veta y color de las maderas más usadas para la construcción, aunque hoy las empresas productoras también han comenzado a ofrecerlas elaborándolas a la medida de las necesidades y gustos del cliente. Su instalación no difiere demasiado de la de otros revestimientos (incluyendo las maderas naturales), y pueden cortarse fácilmente con sierras adecuadas.

Ventajas de la madera sintética

• Las tablas y piezas de madera sintética son livianas y permiten su instalación tanto en el interior como en exterior, en sistema de apoyo o flotante.

• Aunque cada empresa tiene sus propios designios de formulación, la madera sintética nació como material de la construcción verde, aprovechándose fibras naturales y plásticos reciclados para su formulación. Puede elaborarse a partir de fibras de coco, algodón, caña, bambú, arroz, trigo, serrín y otros, logrando distintos pesos, colores y texturas, que luego pueden ser modelados en marcos especiales.

• Este material resiste a humedad, el moho y los insectos. También resiste a la luz solar directa y al calor elevado, y es perfectamente impermeable.

• La madera sintética resiste al alto tránsito, sin mellarse ni astillarse como lo hace la madera natural.

• Es de fácil mantenimiento y limpieza, y su instalación es simple y variada, permitiéndose el uso de adhesivos, clavos, tornillos, grampas y otros, dependiendo del sitio de instalación.

• Aunque su aspecto pueda parecer el de una madera natural laqueada o plastificada, una de las contras que recibe este revestimiento es que no logra imitar del todo a la madera, ante los ojos más exigentes. También es de un costo más elevado al de la opción natural, pero este es un detalle menor cuando se compara la versatilidad, durabilidad y resistencia de la sintética.