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Cómo elegir el tipo de pintura

La pintura que elegimos para decorar cada uno de los ambientes de nuestro hogar dice mucho más de lo que pensamos. El simple color puede modificar nuestro estado de ánimo, puede alegrar e iluminar, o bien calmar y apaciguar una estancia o cualquier ambiente del hogar. Y, por fortuna, en el mercado podemos hallar una enorme variedad de pinturas, tonos, estilos y acabados para que nuestro hogar quede, simplemente, sensacional.

 

La elección depende del lugar

En lo que respecta a las pinturas que aplicamos en el hogar, tenemos múltiples opciones. Una de las primeras determinaciones para la elección de la pintura es el sitio en donde la aplicaremos. Las pinturas de interiores tienen acabados parejos, pero son inadecuadas para exteriores, donde necesitamos aplicar pinturas que sean más resistentes a la luz solar directa, a la humedad y al desgaste.

También la habitación donde la colocaremos dice mucho al momento de elegir el material: en el cuarto de baño y en sitios húmedos debemos procurar elegir pinturas resistentes a los hongos, mientras que en el cuarto de los niños podemos elegir pinturas “lavables”, a prueba de manchas.

Como ves, la elección de la pintura no sólo se resume en el color, sino en tantos otros detalles.

 

También los materiales necesarios son un tema a analizar: a soplete, a brocha, a pincel o a rodillo, por ejemplo, y si se trata de fibras y cerdas naturales o sintéticas dependerá del tipo de pintura elegida.

 

Pinturas de acabados especiales

El tipo de pintura puede ser de base oleosa (aceite) o látex (a base acuosa o de agua). Entre ellas tenemos muchas posibilidades: barnices, lacas, esmaltes sintéticos, látex y pinturas de acabados decorativos, como acrílicos, óleos, acuarelas, entonadores y otras. También hay pinturas con texturas, que tienen incrustación de elementos y, al aplicarlas, logran una apariencia singular.

Finalmente, están las pinturas compuestas, que se aplican con dos o más componentes para lograr imitaciones de texturas, superficies o acabados, como craquelados, estucados, símil madera, símil piedra y muchas más.

 

Pinturas según su composición

En relación a su composición física y química, las pinturas ofrecidas en el mercado nos dan las siguientes elecciones:

 

Temple: Es una pintura permeable y porosa, de acabado mate (opaca). No es demasiado resistente a la humedad, siendo adecuada para habitaciones, salas de estar, pasillos y corredores y otras.

 

Esmaltes: Son pinturas sintéticas. Puede ser esmalte graso (más utilizada, pues se puede aplicar en interiores como también en exteriores, resistente a la humedad pero no tanto al sol directo) o esmalte sintético (acabado liso y parejo, mate o satinado, aplicable sobre diversas superficies incluyendo metales y plásticos).

 

Pintura plástica: Es una pintura con una textura casi gomosa, muy adecuada para su uso en exteriores. Tiene gran resistencia también al roce, y puede ser aplicada sobre diversas superficies.

 

Lacado (laqueado): De apariencia lisa, pareja y satinada o brillante, es la gran elegida para aplicar sobre maderas.

 

Pintura al cemento: es la más resistente, ideal para aplicar en exteriores y sobre el cemento. Resiste tránsitos altos, roces, humedad y altas y bajas temperaturas. De secado rápido y gran fijación.

 

Pintura a la cal: es también un tipo de pintura muy resistente, aunque aplicada sobre ciertas superficies puede resultar corrosiva. Adecuada para estructuras de yeso, metal y maderas.