La construcción y el mantenimiento de un hogar agregan valor a su precio de venta en el mercado. Aunque no estés pensando en vender la propiedad, siempre es bueno saber que posees un bien valuado en el mercado a un precio adecuado, para poder así tener mayor seguridad económica en el futuro.
Por eso, muchas personas eligen construir o adquirir propiedades en vecindarios bien valorados. Pero, ¿qué hacemos cuando el vecindario comienza a deteriorarse, y a perder su valor comercial de reventa? Pues podemos agregar valor, comenzando por casa.
Si tus vecinos suelen tener pinturas descascaradas, cercos mal pintados o sus hogares en desorden, no tienes por qué seguir el ejemplo. En lugar de ello, procura ser tú quien de el ejemplo, mejorando el aspecto del hogar.
Mantén tu casa siempre en condiciones. Poda el césped, pinta los cercos y las paredes. Cuando comiences a realizar pequeñas renovaciones y tareas de mantenimiento regular, verás que más de un vecino se entusiasma, y comienza a mejorar también lo suyo.
Cuando los vecinos se reúnen pueden lograr maravillas. Pero, a menudo se requiere de alguien que dé el primer paso.
Si tienes un plan que pienses que puede mejorar el vecindario, organiza una reunión con tus vecinos. Puede ser en la calle o en tu casa, o bien en un sitio de reunión pública como una plaza. Procura tener bebidas y bocadillos, si lo prefieres, para que los vecinos se sientan más a gusto y con menos apuro por retirarse.
Comiencen la reunión charlando y conociéndose. Luego, postula tu propuesta: contratar un servicio de vigilancia, pedir subsidios para colocar juegos infantiles en la plaza, o también comprar pintura al por mayor para remozar las propiedades a un menor costo. Formula tu propuesta comentando el propósito, y también todos los números involucrados. Luego, permite a los vecinos formular sus preguntas o comentarios, y responde con respeto. Así, podrás acercarse a lograr acuerdos y mejorar el barrio o el vecindario entre todos, por menos dinero de lo que se esperaba. Recuerda que todo grupo necesita un líder o una persona dispuesta a hacer las investigaciones y el “trabajo duro”, y si tienes la motivación, te será sencillo tener también las ganas de hacerlo.
También puedes diseñar estrategias que pienses que agreguen valor y seguridad a tu vecindario. Puedes hacerlo tú mismo, o en conjunto con tus vecinos. Diseñen un plan o propuestas que mejoren el barrio, y pónganlas en papel. También, averigua en tu municipio los requisitos para presentar peticiones, como colocar reductores de velocidad en las calles, mejorar el alumbrado público, mejorar la seguridad o la vigilancia, colocar semáforos o lo que pienses adecuado.
Cumplan los requisitos determinados. Puede ser una junta de firmas, o bien la simple presentación de un proyecto bien formulado. Así, el municipio determinará los fondos públicos necesarios para mejorar el vecindario y agregar valor a las propiedades.