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Versión para imprimir del artículo Techos: tela y tejas asfálticas. No incluye formatos especiales ni imágenes.
Los materiales asfálticos son de los más requeridos para la construcción de viviendas en estos tiempos. Para aislar y proteger los exteriores de los techos, puedes aprovechar la estética y funcionalidad de las telas y tejas asfálticas, como verás a continuación.
La tela asfáltica es uno de los recursos más utilizados para la aislación e impermeabilización de techos. Se trata de rollos flexibles con material adhesivo que se activa mediante el calor, en un mecanismo similar al de la membrana común. Ya que se trata de un producto elástico, puede copiar las formas de casi cualquier superficie incluyendo desniveles, marcas constructivas, y también puede aplicarse sobre tejados.
Su formulación es simple, a la vez que eficiente. Es una plancha de fieltro saturado con asfalto, que se une a una plancha de asfalto combinado con fibras minerales, asbesto, fibra de vidrio u otros tipos de estabilizadores de naturaleza orgánica, dependiendo del tipo de tela asfáltica que la obra o que el clima exigieran. En su cara externa posee una capa de gránulos minerales y una fina capa de exposición de aluminio, pizarra u otros acabados, logrando un producto de un grosor total de unos 4 milímetros, en promedio.
La instalación de la tela asfáltica es tan sencilla, que con poca práctica podrás hacerla tú mismo y sin la necesidad de contratar a especialistas, aunque esa es siempre una buena idea, cuando el presupuesto lo permite. Primero se debe limpiar a la perfección la superficie, sobre la que se aplicará una pintura bituminosa que permitirá el sellado de la tela asfáltica, y que aporta propiedades anticorrosivas, hidrófugas, e impermeabilizantes.
Ya listos los rollos de la tela, se irán aplicando con la ayuda de un soplete de calor sobre la pintura seca, activando con la temperatura el alquitrán de la tela hacia la superficie a cubrir.
Para potenciar la aislación e impermeabilización, puede instalarse dos capas de tela asfáltica en direcciones perpendiculares, o bien sellarse en su capa externa con una nueva aplicación de la pintura bituminosa. En lo que respecta a la estética final, sobre el material puede instalarse mortero, baldosas, vinilos o pinturas.
La teja asfáltica es otra de las geniales soluciones de aislación e impermeabilización para tu obra, con un agregado de estética mucho más agraciado. Estas tejas son resistentes a los elementos, son impermeables, resisten las filtraciones y se ofrecen en gran variedad de estilos.
En su composición, las tejas asfálticas poseen dos capas exteriores de asfalto modificado, y un refuerzo interno de fibra de vidrio. La superficie expuesta se cubre por una capa de arena de sílice ceramizada a alta temperatura, coloreada, que le da su aspecto a la vez que funcionalidad. Estas tejas resisten las lluvias, el viento, la nieve y las heladas, el sol directo y otros, también son flexibles, por lo que logran acomodarse a las estructuras más diversas, y se mantienen inalterables con el paso del tiempo, lo que reduce los gastos y esfuerzos en su mantenimiento.
Si instalación es sumamente sencilla y, aunque pueden colocarse en diversas superficies, se recomienda limpiar, preparar y recubrir antes el techo con fieltro aislante y una capa adhesiva, sobre las cuales se clavarán las tejas uniendo las zonas con adhesivo) recortándolas a la medida, solapándolas tanto a lo ancho como a lo largo, y comenzando siempre desde el borde inferior de la pendiente del techo a revestir.
Aprovecha la versatilidad y la enorme practicidad de aislación de la tela y las tejas asfálticas para cualquier techo exterior de tu proyecto, y lograr una solución efectiva en el costo y muy durable, con poco tiempo de instalación.
