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Versión para imprimir del artículo Idea para dividir un monoambiente. No incluye formatos especiales ni imágenes.
Nada mejor para una primera vivienda fuera de casa como un monoambiente o loft. Es una estructura moderna, práctica, que aprovecha el espacio pequeño integrando los múltiples usos de una vivienda unipersonal, o tal vez de una pareja solamente. Si eres el orgulloso propietario de un nuevo loft, o si el terreno sólo te permite construir algo de estas características, pero deseas ampliar la intimidad de las zonas privadas sin rescindir espacio ni iluminación, hoy tenemos una buena idea para proponerte.
Desde su popularización para los proyectos de construcción en seco, el cartón yeso (yeso compacto, sistema durlock) se ha convertido en el gran favorito de los constructores amateurs que desean hacer remodelaciones sin los conocimientos o el gasto de la construcción convencional. Es un material sumamente versátil que se adquiere en grandes planchas, puede cortarse con cuchillos de precisión o sierras comunes, y se fija a las estructuras mediante guías y tornillos. Puede pintarse y revestirse casi de cualquier manera, y sus posibilidades son virtualmente infinitas.
Además de poder instalarse a muros, techos y pisos para crear divisiones dobles de alma hueca, ayudándose de un marco de madera regular, el cartón yeso también puede cortarse para lograr aberturas fácilmente. Esta capacidad será precisamente la que aprovecharemos para dar intimidad a la zona de dormitorio de un monoambiente, o tal vez a un ático, o una cochera que quieras convertir en una habitación extra en tu hogar.
Lo primero será tomar las medidas precisas del ancho y alto del muro que quieras lograr. Asegúrate de tomar el alto en los dos extremos, por si existieran diferencias. Corta la placa de acuerdo a tus necesidades, o suma dos o más para lograr las dimensiones necesarias. Si el monoambiente fuera de tipo industrial recuperado y tuvieran un techo demasiado alto, puedes simplemente instalar la división asiéndola al piso y al muro, sólo para dar intimidad sin cortar el espacio totalmente.
Corta y prepara las maderas que harán el marco interno de la placa, y fíjalas a la estructura. Toma la altura de la cama y también el ancho, y márcalos en las dos placas de cartón yeso que formarán la división para hacer una suerte de ventana que permita el paso de la luz natural, y la integración de la habitación al resto del espacio, separándolo al mismo tiempo.
Monta ambas placas al frente y dorso del marco de madera. Fija los paneles al muro y al piso con sus guías, y prepara los cortes para cerrar los perfiles de los extremos y de la abertura o ventana central. Agregar un vidrio si quieres, o una placa de policarbonato incoloro, incluso una cortina de acordeón que puedas cerrar y ocultar cuando lo necesites. Dale buena terminación a todas las costuras con enduido plástico para interiores, y por último, aplica una capa de sellador al agua y una a dos capas de la pintura que hayas elegido usar.
Con pasos simples habrás logrado una división que permitirá ampliar el espacio en lugar de reducirlo, gracias a la ventana que se adecuará al espíritu del loft, pero que también permitirá mayor intimidad y ayudará a que tengas un sueño más renovador, sintiéndote contenido incluso en un enorme monoambiente.
