Versión para imprimir
Versión para imprimir del artículo Sistemas de recolección de lluvias. No incluye formatos especiales ni imágenes.
Instalar un sistema de recolección de agua de lluvia es una de las ideas más inteligentes para tu proyecto de construcción. Ya sea uno sobre nivel o una cisterna, estos elementos simples pueden ahorrar enormemente tu consumo de agua potable, optimizar un sistema de riego, y ayudarte a colaborar con el mantenimiento del entorno al tiempo que ahorrar en tus facturas de servicios.
Estos son los dos sistemas más útiles para la recolección de agua de lluvias en las viviendas residenciales. La cisterna es un tanque de grandes dimensiones (hasta 25000 litros), que puede colocarse sobre suelo o bajo tierra, dependiendo del sistema elegido. Es el más adecuado para las zonas con climas muy húmedos, permitiendo aprovechar al máximo las lluvias para el mantenimiento del jardín y del hogar.
El otro sistema es el de contenedor o tanque de tipo barril, de menor capacidad, y adecuado para zonas de menos lluvias. Este sistema suele ubicarse sobre el nivel del suelo y en altura, y ataviarse con una bomba de agua que permita llevar el líquido a tanques internos o al sistema de riego.
De hecho, ambos sistemas pueden incorporar una bomba para impulsar el agua a las mochilas de los sanitarios o a grifos de higiene. Para sistemas de riego comunes (de manguera), bastará con instalar en el barril o en la cisterna una llave de salida en la parte inferior, de modo de permitir que la gravedad impulse el agua por la manguera hacia la zona del riego manual.
Este tanque, como vimos, es el adecuado para zonas de climas lluviosos, pues es de una capacidad mucho mayor. Dependiendo del sistema de recolección, ubicado en la parte superior del tanque y conectando los drenajes de los techos, la cisterna puede incorporar un elemento de filtrado y saneamiento del agua, pudiendo así almacenarse en los meses de lluvias y aprovecharse a lo largo del año, sin provocar peligros para la salud.
La cisterna puede instalarse debajo del nivel de suelo, evitando ocupar el espacio en jardines reducidos. En este caso, el sistema de recolección será sólo mediante cañerías de los drenajes del techo, y se instalará una bomba que permita el uso del agua recolectada.
Los tanques cisterna para recolección de lluvia pueden instalarse prefabricados o realizarse en la obra. Los materiales más elegidos son el concreto, tanques de metales inoxidables, tanques de polietileno reforzado, y tanques de madera con revestimiento plástico en el interior (más económico y liviano, pero menos durable).
Este sistema es de mayor costo, tanto de compra como de instalación y accesorios (la bomba, la excavación, la creación de una plataforma de base que sustente el peso de los tanques más grandes), pero bien vale la pena cuando consideres el ahorro en el consumo de agua potable, especialmente en los sanitarios y sistemas de riego e higiene del hogar.
Los tanques de tipo barril son sistemas de recolección de agua de lluvias más económicos, y de más fácil instalación que las cisternas. Son de una capacidad considerablemente menor, y se los suele instalar en plataformas, elevándolos del suelo para facilitar su uso.
Si bien puede instalarse una bomba que permita empujar el agua hacia sistemas, los tanques de barril suelen utilizarse simplemente por acción de la gravedad, con una salida ubicada en la parte inferior conectada a una manguera, para realizar el riego, tareas de limpieza del hogar, o llenado de estanques.
La metodología de recolección también conecta los desagües de los techos, y puede dejarse la abertura superior descubierta (aunque siempre cubierta con malla anti hojas e insectos) en el momento de la lluvia, para aumentar su recolección. Los materiales más elegidos para estos tanques de tipo barril son la madera recubierta con plástico en el interior, aunque también pues optar por viejas barricas (barriles) de bebidas, tanques de polipropileno, concreto y metal galvanizado o acero inoxidable, que elevarían el costo pero también ampliarían su vida útil.
Analiza las opciones de tu mercado local y asegúrate de instalar cisternas o contenedores para recolectar el agua de lluvia. Será un acto responsable con el entorno, y también ahorrarás mucho en el consumo de agua potable en tu hogar.
