La madera es uno de los materiales más versátiles que encontramos dentro del mundo de la construcción. Puede ser usada tanto como sistema estructural, como para revestimientos de pisos y paredes (en interior y exterior), o estructuras internas como escaleras, entramado de techos, y pisos suspendidos.
La madera es un excelente material para la construcción gracias a ciertas características particulares: es aislante térmico, acústico y mala conductora de la electricidad, siempre que haya sido secada correctamente. Otras de las ventajas son su poco peso, su maleabilidad y su resistencia a los movimientos sísmicos. Por otro lado, también tiene varias contras: es porosa, deformable por incidencia de la humedad, puede ser atacada por insectos y moho, y es combustible. Pero todas estas desventajas son subsanadas por tratamientos específicos que se le aplican en forma industrial, según el uso que se le vaya a dar.
El costo de la construcción en madera es mucho más bajo que con otros sistemas constructivos, lo que la convierte en una excelente alternativa. Para asegurarnos de que la madera usada proviene de bosques gestionados de forma responsable con el medio ambiente, debemos procurar que tenga el sello FSC. o, en su defecto, utilizar madera reciclada (la “Guía de la buena madera”, de Greenpeace, puede ser de gran ayuda ante la duda).
Los sistemas constructivos en madera son, básicamente, de dos tipos: de “tronco macizo” o de “entramado ligero”. En el primer caso, se utilizan directamente los troncos enteros o cortados en forma de tablones. El “entramado ligero” es el sistema más habitual y práctico, ya que reduce notablemente el tiempo de construcción.
La estructura básica de la construcción está formada por módulos de madera formados por elementos lineales (tirantes) unidos por sistemas de escuadras. Estos módulos vienen pre-fabricados, en distintos tamaños, y permiten “armar” la casa como si fuera un rompecabezas, ubicando los paneles sobre una base de cemento, según el diseño. Estos paneles se revestirán luego, en el interior y exterior, de distintos materiales: piedra, madera, cerámica, etc. Soportan cualquier tipo de revestimiento. Entre ambas caras se colocan material aislante térmico e ignífugo, y todo el sistema de cables eléctricos y cañerías, antes de revestir.
El sistema de entramado soporta cualquier diseño y tamaño de construcción lo que, unido a las ventajas propias de la madera, lo convierte en una excelente alternativa frente a los sistemas constructivos más tradicionales.