Para quienes tienen una casa ubicada en un gran terreno, o una casa de descanso fuera de la ciudad, la zona de acceso, el camino desde la entrada hasta la casa propiamente dicha, suele ser un tema de no fácil resolución: las opciones son muchas y, la mayoría, muy vistosas, aunque no todas son igualmente prácticas o convenientes.
Piedra partida o la grava. Una de las opciones más económicas, especialmente si el camino es amplio (ya sea en largo o en ancho), es la piedra partida o la grava. Si bien queda muy bien, tiene algunos inconvenientes. Uno de ellos es que debemos evitar que crezcan hierbas que afearán el aspecto y, además, no podremos quitar con facilidad. Para evitar esto, tenemos dos opciones: si el camino es plano, sin pendiente, podemos colocar sobre la tierra una malla metálica que impida el crecimiento de hierbas y pasto. Si tiene pendiente, la malla es inviable porque la piedra resbalaría. En ese caso se debe “matar” la tierra con sal, para evitar que crezcan yuyos. Debemos hacer zanjas pequeñas a los costados del camino para evitar que las piedras se vayan saliendo de los límites.
Adoquín. El adoquín es una opción que queda muy bien, pero sólo si está bien colocado. Por lo general, se hace una base de arena compactada y se compone algún diseño con los adoquines para que vayan trabando entre sí. Se deben sellar las juntas con cemento, limpiando el exceso para que no queden cúmulos de material sobre los adoquines.
Hormigón estampado. El hormigón estampado es una variante duradera y más económica que otros pavimentos. Consiste en una capa de hormigón a la que se da color y textura, generalmente a través de moldes, para lograr un aspecto que imite otros materiales o, simplemente, tenga aspecto más estético. Para que sea realmente durable se lo debe sellar e impermeabilizar, de manera de evitar filtraciones y posibles futuras grietas.
Pavimento reticulado. Una opción práctica y de fácil instalación es el pavimento reticulado, que puede combinarse con césped para un aspecto más agradable. Es durable y muy resistente, no es resbaladizo, y el agua drena en forma natural.