Las maquetas
son modelos a escala que representan la obra a construir, a partir del diseño
del arquitecto y del ingeniero o constructor. Buscan dar una idea de la vista
final, resistencia y detalles de la obra, incluyendo su división de espacios, adaptación al terreno, escala y tamaños, formas, iluminación, etc.
Por eso, la elección de materiales para la
realización de la maqueta es fundamental, pues logrará convidar al cliente con
las ideas finales de texturas y elementos a utilizar en la obra real.
La elección de materiales dependerá exclusivamente del ejecutor del modelo, a partir de sus necesidades, su ingenio y su disponibilidad. Los diversos materiales modificarán el costo de la maqueta, pudiendo abaratarlo reemplazando materiales reales por otros figurativos, como el uso de placas de acrílico o acetato en lugar de vidrios, o de pinturas sobre cartón en lugar de maderas y ladrillos.
Para la base de las maquetas se suele elegir materiales livianos, económicos y muy maleables. Entre ellos, los predominantes son el papel (blanco, de obra, madera, kraft u otros), la cartulina (escolar, fabriano u otras) y el cartón. El cartón puede ser el gris, el corrugado, o también el microcorrugado, en planchas de 70x100cm.
La espuma rígida es otro aliado en la ejecución de maquetas. Se recorta con cúter o con elementos de calor, y permite lograr volúmenes más fácilmente. También, para dar modelados, el maquetista o el planimetrista pueden utilizar materiales de construcción tales como el yeso (blanco de alabastro) y materiales tapagrietas. Otras elementos comunes son arcilla, plastilinas y masas de modelar.
Entre los naturales, se utilizan maderas. De preferencia livianas y flexibles, como la madera balsa, estos elementos logran dar buenas vista a los modelos en puertas, marcos, tejados de madera, techos y estructuras variadas. También se suele usar tableros para montar sobre ellos la maqueta, pudiendo trasladarla fácil y de forma segura.
Otra posibilidad es utilizar elementos naturales como ramas, hojas y demás para representar los espacios verdes y elementos de la naturaleza en el terreno. A menudo se los representa por cortes de espuma rígida pintados.
No se lo suele utilizar en demasía, debido a su peso y alto costo. Se puede utilizar el de uno o dos milímetros, como mucho, aunque en maquetas de clientes es posible reemplazarlo por acrílicos, resinas, metacrilatos y poliestireno.
Se los usa para dar terminaciones vistosas. Puede presentarse en planchas livianas, incluyendo papeles de estaño. También se usa alambres y chapas para dar resistencia a la maqueta y para producir ciertas estructuras.