Es el sistema constructivo más aprovechado y conocido, y también es uno de los más antiguos. Las obras obtenidas mediante este sistema son sólidas, resistentes, con alta durabilidad y practicidad.
Se basa en la construcción de muros portantes realizados en diversos materiales, entre los que destacan ladrillos, bloques, piedras y hormigón armado. Además de los muros portantes se elevan los de mampostería, es decir, divisiones de la obra que no soportan el peso de la estructura; estos también pueden ser elaborados en diversos materiales constructivos, incluyendo los mencionados y también ladrillos portantes, aunque no suelen ser realizados con hormigón armado, por su peso.
Esta técnica es del tipo de construcción en húmedo, con tiempo de espera para el asentamiento y cuaje de los materiales, de alto costo y gran tiempo de espera.
Sobre estas estructuras se posan, distribuyendo su peso sobre los muros portantes, las vigas que dan sujeción a la estructura del techo. Luego, toda la estructura cuenta con un revestimiento de revoque grueso y fino, que aporta aislación y adecuación a la vida moderna, ocultando o soportando la cañería, el revoque, tejas y demás por el exterior.
La tradicional racionalizada es una variación del sistema constructivo tradicional, que utiliza procedimientos y elementos racionalizados, como paneles livianos, instalaciones y mampostería livianas o alternativas.
Hay más sistemas racionalizados, que buscan construir obras más livianas en menos tiempo de ejecución, entremezclando sistemas constructivos húmedos y secos, además de incorporando técnicas y elementos industrializados (bloques premoldeados y demás).
Son dos técnicas muy adoptadas en los últimos tiempos: la wool frame y la steel frame. También son sistemas de obras livianas que tienen excelente distribución del peso sobre toda la estructura, sin requerir muros portantes.
El sistema steel frame utiliza marcos o perfiles de acero que soportan paneles de yeso, madera o piedra por el interior de la obra, capas de aislamiento, y luego paneles rígidos hacia el exterior. Para el revoque se suele utilizar cemento con salpicado cementicio, madera (sidding) o ladrillo visto, en bloques enteros o seccionados. Son construcciones rápidas, más económicas y versátiles, aunque menos duraderas ante las agresiones climáticas de exigencia.
Por su parte, el sistema wool frame es similar al anterior, salvo que incorpora el uso de perfiles de entramados en madera. Es una construcción más liviana y veloz aún, aunque también de menor duración ante situaciones extremas.