En lo que respecta a las posibilidades de iluminación, las opciones son virtualmente infinitas. Más o menos intensas, decorativas o sólo funcionales, frías o cálidas y hasta en una enorme gama de colores, que pueden ir desde el blanco puro hasta la imitación de luz natural.
Aprende algunos buenos consejos para elegir el método de iluminación de cada ambiente, desde un punto de vista estético y práctico.
Los elementos que se usen para lucir la iluminación son casi tan importantes como la intensidad del sistema elegido. Debes adquirir las farolas, tulipas, apliques y demás en función de la arquitectura de la obra y la decoración planificada, desde el momento mismo de la construcción. Ten en mente si hay puntos y elementos que quieres destacar, y el uso que se le dará a cada espacio, para determinar los elementos lumínicos generales, puntuales y auxiliares.
Los elementos dirán mucho sobre el uso e intensidad de la luz de cada ambiente. Apliques opacos y de colores darán luces cálidas, tenues y entretenidas, mientras que sistemas a la vista (como tubos y tulipas abiertas) o elementos translúcidos otorgan un mayor provecho de la luz intensa.
Ten muy en cuenta qué es lo que quieres lograr mediante la iluminación, en lo que respecta a las dimensiones de cada ambiente. Los apliques de baja estatura, montados sobre el cielo raso o empotrados, ayudarán a ampliar el ambiente. Los que cuelgan y sobresalen, más voluminosos y llamativos, lo achicarán en su percepción visual, además de dificultar el tránsito en zonas de paso.
Recuerda que cada artefacto de iluminación tiene sus propias condiciones particulares en cuanto a la emisión de calor e influencia sobre el espacio circundante. Los de cuarzo, por ejemplo, queman las partículas presentes en el aire y pueden oscurecer tus muros, si los colocas empotrados o cerca de estas estructuras. También las dicroicas generan alto calor y pueden oscurecer el techo o los muros, por lo que es habitual montarlas dentro de contenedores plásticos de color negro u oscuro, disimulando este problema.