En este blog sobre ideas para construir, a menudo traemos temas que podrían pertenecer a un blog de decoración. Este es el caso, pues hablaremos de pinturas. ¿Por qué introducimos la temática en un sector dedicado a la construcción? Pues porque esta idea decorativa posee una característica funcional que te evitará la instalación de elementos como pizarras y tableros.
Comúnmente, sobre la obra gruesa va la obra fina, el revoque o primer revestimiento. Sobre éste aplicamos las terminaciones más decorativas, como la pintura en diferentes estilos y tipos. Y sobre ésta colocamos, finalmente, los elementos utilitarios, como pizarrones educativos, pizarras laborales y tableros. Pero con las nuevas ofertas y tecnologías que hallaremos en el mercado, podremos evitarnos estos dos últimos pasos, fusionándolos en uno solo: se trata de la aplicación de pinturas funcionales.
Existen pinturas de diversos tipos que puedes aplicar sobre material, madera y hasta sobre piedra. Un ejemplo bastante conocido ya es el de la pintura pizarra, un material de acabado rugoso y opaco sobre el que podemos escribir con tizas, como las que se utilizan en las escuelas, para luego borrarlas pasando un paño y comenzando nuevamente. En el mercado encontrarás pocas opciones en esta pintura, mayormente negra, verde y azul, aunque puedes teñirla o mezclarla para lograr colores únicos.
Hoy el mercado se ha ampliado respecto de nuestras opciones. Para dar un acabado funcional además de estético, puedes optar por dar la terminación con pinturas pizarra de estilo Vileda. Al fijarse, en una o dos capas, estas pinturas adquieren un acabado liso, parejo, brillante y lavable, similar a la superficie de las pizarras vileda o de rotulador. Así, convertirás la pared entera, la puerta o la superficie que prefieras en una gran pizarra sobre la que puedes escribir y borrar, usando rotuladores al agua aptos para pizarras y para vidrios.
Este tipo de pintura se ofrece en una infinidad de colores, incluso en acabados translúcidos que puedes colocar sobre otras, en el caso de ampliaciones y renovaciones de la obra. Esta pintura vileda es una genial idea para una habitación infantil, un cuarto de juegos y entretenimiento, para el taller o para la oficina o el escritorio.
Por otro lado, puedes convertir toda la pared de una estancia en un gran tablero recordatorio, de tipo magnético. En dos a tres capas de esta pintura, cargada con minúsculas partículas metálicas, podrás dejar imanes, sujetadores de papeles y otros elementos, para que al quitarlos el muro se vea como uno cualquiera, con una pintura brillante, duradera y atractiva, y de muy fácil mantenimiento. Esta es una gran idea para una oficina hogareña, un cuarto de labores y también para una habitación adolescente, donde puedes olvidarte de los antiestéticos clavos y tornillos.