La planificación en el diseño de jardín es fundamental. Debes decidir sobre el uso que darás al lugar, para definir los sectores posibles dentro de las disposiciones del espacio.
Al momento de diseñar la obra, planifica el jardín según una zona de piso para comer, una zona verde, caminos laterales o internos, la zona de la piscina, la de juegos y demás.
El piso rígido debe planificarse cerca de la vivienda y no al otro lado del jardín, pues habitualmente necesitaremos tomar elementos del interior y trasladarlos hacia afuera. Al definir el piso rígido, en el estilo que sea, diseña también la zona de la parrilla o del horno externo, dejándolo cerca de este sector pero no pegado a la vivienda, para evitar que humos y malos olores se trasladen al interior.
El piso de césped o verde que hayas elegido complementará el resto del jardín. Planifica según el diseño más funcional, permitiendo zonas de paso o caminos. Recuerda nivelar el terreno de modo que la zona de césped quede uno a dos centímetros por debajo de los caminos y pisos rígidos, para que el césped se mantenga al nivel pero el agua de riego no se escurra hacia el piso rígido. También ten en cuenta las formas, pues un diseño demasiado intrincado (ángulos pequeños, recovecos) pueden ser bellos a la vista, pero harán muy difícil el mantenimiento.
Diseña el sitio de ubicación de los canteros y jardineras determinando los sitios de altura, para poder trabajar el terreno y crear las contenciones necesarias. También, esto te permitirá plantar árboles teniendo en cuenta el mantenimiento de la piscina y del jardín.
Además, definir la ubicación de los canteros y árboles te ayudará a marcar la mejor ubicación de los picos de riego, para poder economizar agua evitando la acumulación en estas zonas, algo perjudicial para las plantas pequeñas.