Una obra residencial no estaría completa sin los correspondientes elementos de seguridad. Define su ubicación y adecua los planos desde el momento mismo del diseño.
Las alarmas de incendio se colocan con detectores de humo y/o de temperatura en cada habitación, para emitir una alarma de sonido agudo que te alertará ante eventualidades. Los sistemas más complejos están conectados a circuitos hídricos que recorren el techo. Al activarse la alarma, no sólo te avisa con el sonido, sino que también despliega una delgada lluvia de agua o de producto corta fuegos para controlar la zona afectada.
Otros también funcionan en conjunto con el sistema de monitores, dando alerta al servicio coordinado (bomberos) de tu ciudad.
Una herramienta por demás útil, en especial en hogares con sistemas de calefacción a gas y/o leña. Son pequeños elementos que se ubican en distintas habitaciones (o en todas las estancias), y que hacen una lectura del aire permitiendo saber si el nivel de monóxido de carbono se acerca a una marca perjudicial para los humanos y animales. También funcionan con una alarma sonora y con luces, y pueden estar conectados con el sistema de monitoreo de emergencias.
No deben faltar en ningún hogar. Los tubos extintores manuales deben estar al alcance de todos, aunque lejos de la vista por cuestiones estéticas. Puedes colgarlos del muro en un sitio de fácil acceso (sin escaleras u otros), y asegurarte de mantenerlo siempre con carga de control de fuegos tipo A B C.
Al momento de definir el diseño de la vivienda, corrobora la facilidad de evacuación. Si hubiera escaleras o desniveles, define la planta de modo de poder transitar libre y velozmente ante emergencias. Marca un sitio junto a la puerta de acceso donde puedas mantener tu kit de emergencias (la mochila de salvataje), y decide también un sistema de luces de emergencia que se activen ante apagones o cuando el suministro eléctrico se viera afectado.
En el jardín, es conveniente planificar una zona segura para protegerte en caso de sismos u otros incidentes. Planifica este sitio lejos de conexiones o vías eléctricas, de gas, cables o elementos colgantes, y en lo posible asegúrate de colocar allí un gran árbol, que de sujeción a la tierra y reparo ante lluvias u otros sucesos.