Cómo elegir una mesada o encimera
La encimera o mesada de la cocina es algo a lo que debemos prestar especial atención. Más allá de una cuestión meramente estética, debes asegurarte de contar con un elemento que sea seguro, resistente y, por sobre todo, que sea muy fácil de limpiar y mantener, y no una superficie porosa que retendría suciedades y restos orgánicos.
En un proyecto de construcción o de refacción de la cocina, analiza las posibilidades que te ofrece el mercado en lo que respecta a las encimeras. Elígela por material, de acuerdo a tus posibilidades, y luego determina el detalle estético. Incluso puedes comenzar por adquirirla y, a partir de su aspecto, definir el mobiliario y las terminaciones, que encontrarás con muchísimas más opciones estéticas en el mercado.
Tipos de materiales para encimeras
El boom de las encimeras ha sido, durante décadas, las piedras. Pero hoy contamos con muchas más opciones, como las que veremos a continuación:
- El acero inoxidable es una de las opciones con menos atractivo estético, pero es también muy fácil de mantener y de limpiar. Resiste bien las altas temperaturas, los ácidos propios de la cocina, los agentes de limpieza y también ciertas fricciones, aunque es más sensible a los golpes y a los cortes o arañazos.
- El corian es uno de los materiales vanguardistas en creciente apreciación. Se trata de una mezcla de minerales y polímeros acrílicos que brinda una superficie homogénea, cálida al tacto y muy dura, aunque susceptible a cortes y al calor. Una de sus ventajas es la versatilidad de colores, y su exclusividad también viene asociada a su alto costo.
- El estratificado es una de las encimeras más económicas del mercado, pues es un aglomerado plastificado que puede imitar casi cualquier textura y apariencia, mientras que no resiste bien los cortes y rayones, las altas temperaturas, los productos de limpieza ácidos o abrasivos, y no posee demasiada impermeabilidad (el agua incluso puede pudrirla).
- El granito es un clásico de las encimeras. Es más fácil de mantener que el mármol, resiste bien los golpes y las altas temperaturas, y es muy agraciado a la vista, con un precio que va desde lo moderado hasta lo alto.
- El mármol es algo más económico, también resistente y se ofrece en infinidad de colores y acabados. No resiste bien la suciedad y, si no ha sido correctamente sellado, su porosidad lo puede hacer inseguro. Para contrarrestar estas deficiencias, hoy se opta por el mármol compac, mezcla de mármol y cuarzo, resistente a los ácidos, abrasivos y manchas, sin poros.
- La madera es un clásico de las cocinas rústicas y más elegantes. Las encimeras de madera no resisten bien los cortes y golpes y, dependiendo del tratamiento dado, podrán o no resistir los ácidos, el calor y los abrasivos. Es poroso y susceptible a sufrir daños de humedad, por lo que requiere de alto mantenimiento.
- El silverstone es un aglomerado de cuarzo, resinas polímeras y cristal, con enorme resistencia, libre de poros y una apariencia similar al granito. Soporta manchas, el desgaste, y tiene fácil mantenimiento y limpieza, pero es de alto costo y puede no resistir bien los cambios bruscos de temperatura.
Cada uno de estos materiales para encimeras se ofrecerá en el mercado a distintos precios, niveles de calidad y estética. Procura elegir el más duradero y resistente, fácil de mantener y de limpiar, y a partir de su apariencia configurar la del resto de los elementos y componentes de la cocina. Así facilitarás el trabajo y lograrás una cocina mucho más fácil de usar, cómoda y bella.