Ideas para aprovechar ladrillos sobrantes

¿Qué hacer con los ladrillos sobrantes?

¿Sobraron ladrillos y bloques de construcción de tu proyecto? No te apresures por regresarlos para pedir un reembolso: aquí te contamos soluciones funcionales, decorativas y muy fáciles que podrás implementar para mejorar cualquier proyecto de construcción. Toma nota y anímate a dar ese paso extra, para lograr residencias simplemente sensacionales.

¿Qué tipos de ladrillos se pueden reutilizar?

Podemos “recuperar” todo tipo, forma y tamaño de bloques para la construcción en diferentes proyectos. Recuerda que estos elementos pueden acomodarse a casi cualquier terreno, cortarse a la medida, y proporcionan una genial fijación para desniveles y otras construcciones.

Podrás reutilizar ladrillos comunes cocidos, de adobe u otros, con y sin cazoletas, huecos y macizos, perforados y hasta adoquines planos o perforados, según lo que dispongas. El tipo y forma del bloque posiblemente te dará ideas para su mejor uso. Por ejemplo, los grandes bloques perforados y huecos pueden ser los más adecuados para crear escaleras firmes en tierras en pendiente, mientras que los macizos, más pequeños en su espesor, encontrarán su mejor uso en la creación de senderos.

Cómo aprovechar los ladrillos sobrantes

Como vimos, los bloques huecos o perforados, que poseen la capacidad de albergar tierra en su interior, te ayudarán a fijar el terreno sin la necesidad de cimientos ni estructuras de hierro. Para hacer escalinatas naturales, por ejemplo, apalea el terreno para lograr la forma de la misma, acomoda los ladrillos huecos en su lugar, y rellénalos con la misma tierra retirada para hacer los peldaños. Riega abundantemente y repite el llenado y regado hasta que los bloques se afirmen en su sitio y queden bien asidos al terreno. Conforme crezcan hierbas a su alrededor e interior, la escalera se hará aún más firme y se hará una mejor contención el terreno.

Usando esta misma técnica podrás fijar bloques huecos para hacer hogueras de exterior, canteros para plantas (con cierta altura, apilando hasta tres niveles de bloques) y también plataformas para muebles de interior y de exterior, muy resistentes y por demás económicos. Prueba apilar bloques huecos en dos hileras (cuatro a seis de cada lado) con una separación de unos 1,7 metros entre sí. Usando pilares de madera para exteriores, cortados a 2 metros de largo, insértalos uniendo en puente los bloques, para hacer una suerte de banco de asiento muy resistente para cualquier espacio del jardín.

En interiores, o para darle más estética, agrega también un bloque dispuesto en orientación vertical, sujetando otros dos listones de madera, para hacer un respaldo con una apariencia única. Para sujetar el respaldo puedes simplemente disponer el asiento en contra del muro, o afirmar con placas de hierro atornilladas entre ambas estructuras.

Con esta misma técnica de usar bloques huecos como sujetadores podrás hacer mesas auxiliares para la parrilla o cerca de la alberca, para dar un aspecto industrial al interior, y para la creación de cualquier forma de asiento, cama, o baldas y estantes para posar y lucir elementos.

Si tienes ladrillos macizos, crearás piezas geniales por poco costo. Marca y rebaja el terreno donde quieras hacer una plataforma, sendero, o divisor del jardín. Acomoda ladrillos macizos o adoquines, golpeándolos suavemente para aplanar la tierra debajo de ellos, y para nivelarlos tanto como puedas. Rellena los intersticios (o el interior, en caso de adoquines perforados) con tierra, arena, gravilla o la mezcla que quieras, y riega abundantemente por algunos días, reiterando el procedimiento para afirmar la piezas. No quedarán asidos como en un cimiento con material adhesivo si no lo hubieras usado, pero serán un suelo resistente a la intemperie que logrará una solución muy económica a tu obra, reutilizando elementos sobrantes y reduciendo tu presupuesto.