Para aprovechar el espacio debajo de la escalera podrías crear un mueble a la medida, pero hoy te proponemos hacer un rincón oculto y especial para tus mascotas. Se trata de una cucha de interiores con todos los lujos que, incluso si no tienes mascota, podrías adaptar y hacer para que jueguen tus niños, o para simular que sí tienes un perro guardián en un intento de desalentar a los posibles perpetradores.
Necesitarás pocos materiales para hacer las bases de esta habitación animal, aunque la lista dependerá de tus intenciones. Puedes hacer este proyecto con maderas, tabiques y muchos elementos, pero sólo a modo de explicación, aquí te contamos cómo hacerlo con placas de cartón yeso.
Lo primero por hacer es tomar muy bien las medidas del sitio donde vayas a crear el rincón para mascotas. Apunta en tu libreta de trabajo la profundidad y largo del piso, del techo, de la inclinación por detrás de la escalera. Apunta también el muro de lado, si vas a complementar la partes (por ejemplo, si hubiera una puerta de vidrio y no muro a los lados), y el frente, en una o dos placas según el tamaño que vaya a tener tu proyecto. Si vas a crear canastros, repisas o niveles dentro de la cucha oculta, apunta también sus medidas, para adquirir el material.
Siguiendo tu diseño compra las placas de yeso compacto (cartón yeso, sistema Durlok). Recuerda que adquirir placas grandes y completas puede ayudarte a ahorrar dinero, y podrás cortarlas fácilmente con un cuchillo de precisión resistente y algo de paciencia. Siguiendo tus anotaciones, corta todas las piezas de la placa del cartón yeso, y también las guías metálicas para su instalación. Lija suavemente los lados, y comienza a trabajar asiendo primero las guías al piso, muro y dorso de la escalera, y luego las placas a las guías, a la vista o por dentro. Rellena los cantos con enduido plástico para interiores, y ya seco podrás lijar y pintar o recubrir la pieza con el revestimiento elegido.
Instala primero el piso y los dos laterales (o uno, según tu proyecto). Coloca la guía e instala el techo, y luego el lateral detrás de la inclinación de la escalera: siguiendo este orden podrás trabajar por tu cuenta, sin necesidad de alguien que sostenga ese panel, aunque si cuentas con ayuda siempre es mejor.
Instala a continuación los complementos internos, si tu diseño los lleva, y por último fija la puerta del frente, a la que hayas quitado un sector para la puerta, y tal vez otro para la ventana. No la fijes usando las guías, sino hazlo asiendo bisagras a uno de los laterales, en una o dos placas según el tamaño de la pieza. Esto permitirá abrir la “habitación” por completo para poder asearla, ventilarla y acomodar el interior.
Por último, coloca un alfombrado sintético en la base, el revestimiento del interior, el colchón de la camita, los platos de comer y beber, la caja de arena sanitaria y todo lo que quieras incorporar a esta cucha especial, creada para aprovechar el espacio por debajo de la escalera de un modo magistral.