La elección de la grifería y de la pileta de la cocina responde a muchos factores, por ejemplo, a las dimensiones de la mesada y al uso. La composición familiar, por ejemplo, tiene mucha influencia en esta elección: no es la misma cantidad de vajilla la que se lava a diario en una familia de 3 personas, que en una de 8, o en una vivienda en la que se suele recibir a muchos invitados y se preparan comidas elaboradas que requieren una pileta amplia, grifería alta, y espacio de mesada suficiente.
Si lavas la vajilla y los alimentos para muchas personas, probablemente quieras colocar en tu nueva cocina una pileta doble, para poder higienizar en una y escurrir en la otra. En cambio, si suelen tener mucho uso de mesada y poco de pileta, una simple dejará más espacio en la superficie de apoyo.
También si usas utensilios pequeños sabrás que una pileta y grifería convencional será suficiente, mientras que si usas ollas altas o elementos voluminosos al cocinar, una pileta amplia y grifería alta y móvil será lo más conveniente.
En el mercado podrás encontrar un verdadero abanico de posibilidades. La grifería convencional se compone de un tubo de salida y un comando doble para el agua fría y caliente, útil para higienizar elementos y en diseños de cocinas clásicas. Este sistema es más económico, ocupa más espacio y da un aspecto más tradicional a la obra.
Por otro lado, puedes elegir la grifería monocomando, mucho más compacta en su parte visible y más moderna en aspecto. Son algo más costosas, pero muy funcionales y prácticas, además de vistosas. Dentro de esta línea existen las griferías monocomando con “duchador”, un tubo móvil y flexible (como una manguera) que permite mayor movilidad y diferentes alturas en la salida del agua.
También hay piletas de cocina en diversos tipos y materiales. Las más clásicas de aspecto, amplias y prácticas, son las piletas dobles de cemento revestido. Permiten higienizar comidas y vajilla simultáneamente, escurrir sin mojar, y también la colocación de tapas y rejillas superiores, al nivel de la mesada, evitando perder el espacio. Necesitan una grifería móvil o desplazable para llegar a toda la superficie.
En cuanto a los materiales, también puedes optar por piletas de acero inoxidable, más modernas y versátiles, pues existen simples, dobles, en diferentes anchos y profundidades, incluso de distintas formas con círculos y óvalos.
Finalmente, encontrarás piletas de resinas sintéticas, muy higiénicas y llamativas, ideales para cocinas modernas, al igual que las piletas de cerámica. Como contras, estas dos opciones son costosas, no resisten tan bien a los cambios bruscos de temperatura, y son propensas a rayones y maltratos.